En noviembre de 2024, según datos del DANE, la producción del sector manufacturero registró una caída del -0,8% en comparación con el mismo mes de 2023. Por su parte, las ventas crecieron un +1,1%, mientras que el personal ocupado disminuyó en un -0,4% durante ese periodo.
A lo largo de 2024, la industria manufacturera evidenció una contracción tanto en producción como en ventas, con caídas del -2,4% y -2,2%, respectivamente. este comportamiento se debe al bajo desempeño de sectores clave como la cadena automotriz, el cuero y sus productos, los materiales de construcción y la refinación de petróleo. Estos sectores, fundamentales por su capacidad para generar empleo y dinamizar la economía, enfrentan serias dificultades, lo que ha generado preocupación en la ANDI.
Para el gremio empresarial en noviembre, la coyuntura económica estuvo marcada por varios factores, entre ellos, el intento del Gobierno Nacional de lograr la aprobación del Presupuesto General de la Nación para 2025, sin considerar los impactos tributarios sobre la ciudadanía y el sector productivo. Asimismo, se expresó preocupación por la reforma al Sistema General de Participaciones (SGP), orientada a aumentar las transferencias a las regiones, la propuesta de una Ley de Financiamiento que finalmente fue archivada por el Congreso, el inicio de la negociación del salario mínimo, y la alta volatilidad de la tasa de cambio.
Ante este panorama, la ANDI ha reiterado al Gobierno Nacional la necesidad urgente de implementar una estrategia de crecimiento que impulse la actividad económica y fomente la generación de empleo. Esto subraya la importancia de contar con una agenda de desarrollo a largo plazo para fortalecer al sector manufacturero. Desde el gremio, se insiste en que el crecimiento económico, la actividad empresarial y la capacidad de aumentar la producción son condiciones indispensables para atender las principales necesidades de la sociedad y construir una economía sostenible.