En un emotivo acto de solidaridad, el empresario Arturo Calle hizo un llamado contundente al sector privado para unirse en apoyo a las comunidades más vulnerables de Medellín, afectadas por la actual temporada de lluvias. Su mensaje, cargado de humanidad y sentido social, fue más allá de una donación: fue una invitación a hacer empresa con alma y responsabilidad.
“Aquí hay unos barrios donde hay mucha pobreza, y esta ciudad no se merece tener barrios con tanta pobreza”, expresó con firmeza el empresario, nacido en el barrio Manrique de Medellín.
Arturo Calle, quien llegó al piso 12 de La Alpujarra, exclusivamente para entregar una donación económica, anunció un aporte adicional de $500 millones para la construcción de viviendas dignas y urgentes, y planteó como meta la movilización de $20.000 millones entre el sector privado y la Alcaldía Distrital. “El dinero se hizo para que le sirva a uno, a la sociedad y al ser humano. El dinero no se hizo para la sepultura. La riqueza más grande que tiene un ser humano es tener al prójimo y tenderle la mano a quien lo necesita”, reflexionó.
Un llamado al empresariado con conciencia social
Reconociendo la generosidad del empresariado antioqueño, Calle instó a doblar esfuerzos en momentos críticos como este: “A los empresarios con más capacidad económica, les pido que colaboremos con la ciudad y con aquellas clases sociales que no tienen una vivienda digna.”
Aunque su visita tenía como único propósito extenderle una mano solidaria a la ciudad, Arturo Calle fue sorprendido con un homenaje por parte de la Administración Distrital de Medellín, que le otorgó la Medalla al Mérito Cívico y Empresarial Gonzalo Mejía, en la Categoría Oro, como reconocimiento a su legado empresarial y compromiso social.
El alcalde Federico Gutiérrez destacó su trayectoria como símbolo de integridad y compromiso:“Es un hombre que ha hecho de su historia un legado de compromiso, rectitud y esperanza. Su liderazgo visionario, su generosidad y su apuesta por el empleo digno, la industria nacional y el bienestar de las personas lo convierten en un referente de lo que significa hacer empresa con humanidad.”
Un hijo de Medellín que honra sus raíces
Arturo Calle nació el 13 de agosto de 1938 en el barrio Manrique. A los 28 años, fundó su primera tienda en Bogotá, en la calle 13 con carrera 14. Hoy su compañía es una de las más reconocidas del país y genera más de 6.000 empleos directos, gracias a un modelo de negocio que valora el talento humano, la producción nacional y el respeto por el trabajador.
Además de destacar la labor del empresariado, Calle elogió la gestión de la actual administración municipal en la lucha contra la corrupción: “Es un milagro que, en seis meses, una alcaldía que en su momento fue corrupta haya recuperado la confianza de la gente. Tenemos un alcalde de una categoría que nos llena de orgullo. Pero él solo no puede hacerlo todo”, concluyó.
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